¿QUÉ ES EL «ACTIVADO» DE SEMILLAS?

Hay una forma mejor de comer semillas y frutos secos crudos ¡Activándolos! Y aún diría más: germinándolos.

Es un proceso que cuesta muy poquito y hace que sucedan una serie de acontecimientos en la semilla, que en cuanto los sepas, estamos seguros de que querrás beneficiarte de ellos.

¿Qué es el “activado”?

Activar los frutos secos y semillas consiste en remojarlos para eliminar sus inhibidores enzimáticos.

Los inhibidores enzimáticos son moléculas que contienen las semillas para evitar que se desencadene el proceso de germinación antes de tiempo. Así, quedan protegidas para que la germinación se produzca sólo cuando en la naturaleza se den las condiciones óptimas de humedad y calor que necesitan.

Cuando los remojamos, los inhibidores pasan al agua.

¿Y qué es lo que sucede?

Pues que la semilla despierta. Por fin ha encontrado agua para crecer y comienza a absorberla. Esto hace que sucedan sus procesos naturales de evolución, en los que se inactivan antinutrientes (inhibidores enzimáticos), que son como los guardianes que tiene la semilla, que la protegen hasta que ésta encuentra las condiciones necesarias para su desarrollo (agua y sol). Estos antinutrientes, que como ya he dicho son tóxicos naturales de defensa de la semilla (como el ácido fítico y los taninos) hacen que tengamos dificultad en absorber sus nutrientes y pueden provocarnos digestiones bien pesadas. Al activarlas, estos antinutrientes pasan al agua de remojo, mientras en la semilla, comienzan a suceder cascadas enzimáticas, que resultan positivas para nosotros, ya que potencian el contenido nutricional de la semilla.

¿Cómo se hace?

  1. Pon las semillas elegidas en remojo en un frasco o bote que no sea de plástico.
  2. Cúbrelas bien de agua filtrada, osmosis o embotellada (cuando las semillas comiencen a absorberla ésta se reducirá considerablemente), añade un chorrito de vinagre de manzana fermentado sin filtrar.
  3. Déjalas en remojo entre 6h y 12h más o menos (depende de la semilla)
  4. Una vez concluido el tiempo, enjuágalas bien bajo el grifo y descarta el agua de remojo. (verás que sucia sale.. esto se debe en parte a los taninos y en parte a la suciedad de la semilla…)

¿Cómo usarlas?

Puedes comerlas tal cual. (Las nueces y las almendras están buenísimas así).
En ese caso, ten en cuenta que las tendrás que guardar en un frasco en la nevera. Aguantarán unos 3 días. Puedes utilizarlas para una receta (ya sea de “lácteos”, salsas o leches vegetales) o para cualquier otra receta que pida semillas remojadas. (remojadas son mucho más tiernas, lo que hace que sea mucho más fácil triturarlas y lograr consistencias cremosas)

O las puedes volver a deshidratar (en la deshidratadora). En ese caso, tienes que secarlas muy bien (hasta que estén crujientes) pues de lo contrario se pudrirán rápidamente.

Otra opción es marinarlas para hacerte snacks súper saludables. Ya verás qué diferencia tan abismal hay de las semillas activadas a las normales, las nueces y las almendras se vuelven tiernas y delicadas, es muy agradable comerlas así tal cual.

¿Por qué activar semillas?

  • Para eliminar tóxicos naturales (ácido fítico y taninos)
  • Para neutralizar los inhibidores enzimáticos
  • Para activar los procesos enzimáticos
  • Para incrementar las cantidades de vitaminas (especialmente las del grupo B)
  • Para hacerlas más digeribles
  • Para favorecer la absorción de sus proteínas
  • Para disfrutar de un sabor más delicado

Si te interesa saber más de artículos como ¿Qué es el “activado” de semillas? suscríbete a nuestra newsletter y sigue atento a nuestras publicaciones en Facebook, Twitter, Instagram, Tumblr y Pinterest.

Deja un comentario

× HAZ TU PEDIDO POR WHATSAPP